El gigante minorista Walmart ha llegado a un acuerdo de conciliación en una demanda colectiva presentada contra él por su política sobre las empleadas embarazadas. La multimillonaria empresa tenía una política escrita que prohibía asignar a las trabajadoras embarazadas cargas de trabajo más ligeras en sus tiendas. A las mujeres embarazadas, a las que se debían asignar tareas que limitaran la actividad física intensa, se les decía que siguieran con sus tareas habituales o que se tomaran un permiso sin sueldo. El acuerdo propuesto de 14 millones de dólares está pendiente de aprobación por un juez federal del Distrito Sur de Illinois.
Si se aprueba, se pondrá fin a una batalla legal que empezó hace más de seis años. Los 14 millones de dólares se destinarán a un fondo común. El acuerdo estima que cada uno de los miembros de la clase afectada recibirá un mínimo de 819 dólares o un máximo de 2.049 dólares. Sin embargo, la cantidad depende de cuántos de los más de 11.000 miembros del grupo soliciten una indemnización.
¿Qué ha pasado?
Las demandantes principales, Talisa Borders, Odisha Woolbright y Stacey Lewis alegaron que Walmart "mantuvo una política discriminatoria por escrito hasta el 5 de marzo de 2014, que negaba a las trabajadoras embarazadas los mismos beneficios ofrecidos a otros trabajadores similares en su capacidad o incapacidad para trabajar, en violación de la ley de discriminación por embarazo de 1978." La demanda fue impulsada por Borders que le dijo a su supervisor que no podía levantar más de 25 libras. Debido a su embarazo, solicitó un trabajo más ligero y se lo denegaron. Su supervisor le dijo que tomara una excedencia no retribuida o que continuara con su trabajo normal.
Tras buscar asesoramiento jurídico, Borders presentó una denuncia por discriminación por embarazo ante la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo. Dos meses después de la denuncia, Walmart cambió su política, pero no resolvió el problema con Borders y otras trabajadoras como ella. Después de años de idas y venidas dentro de los procesos de la EEOC, se presentó una demanda colectiva. No se certificó hasta finales de 2018, cuando ambas partes comenzaron la mediación. Los argumentos continuaron durante todo el año y dieron lugar a este acuerdo alcanzado la semana pasada.
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